El presidente del Banco Nación, Eduardo Hecker, destacó este martes el avance en materia crediticia de su banco al haber pasado de una totalidad del crédito comercial de corto plazo en marzo de 2020 para atender la necesidad de las empresas para pagar sueldos a ya tener el 40% de sus activos comerciales en créditos de más largo plazo para financiar inversiones.

Así, lo aseguró en la primera edición de los Premios Banco Nación a la Industria, un evento que se realiza esta semana en Cuyo, el Noreste y la Ciudad de Buenos Aires para premiar a sus clientes que promueven la inclusión social, la generación de divisas y la producción sustentable. Allí, detalló que ya llevan entregados $600.000 millones a las empresas, lo que los convierte en "el banco más activo de crédito a las empresas" con tasas que bajaron desde más del 80% a menos del 30%.

"Hoy casi el 40% del crédito es para inversión de largo plazo", aseguró ante los empresarios reunidos en el Hilton.

Además, adelantó que buscará profundizar el trabajo con todas las provincias "independientemente de su signo político" que quieran dinamizar la producción enfatizando el carácter federal del banco, en un gesto a Juan Manzur que lo escuchaba en primera fila.

BNAJuan Poli

Más adelante, en una rueda exclusiva con periodistas, el titular del Nación aseguró que es optimista en que las elecciones de noviembre les darán un mejor resultado que las PASO, pero advirtió que "No se puede trabajar solo por los votos, sino que hay que seguir trabajando por el país" y adelantó que piensa profundizar la penetración y transversalidad del alcance del banco en comercios de proximidad también en villas y barrios, además de sostener los descuentos en librerías, en supermercados chinos y el más reciente acuerdo con las farmacias para que los clientes del banco tengan descuentos adicionales a lo de sus obras sociales en la adquisición de medicamentos.

En este sentido, adelantó que para él lo que realmente reduce la pobreza es la generación de empleo genuino mediante inversiones y empresas como las premiadas. Y aclaró que "Cuidamos nuestra liquidez, no regalamos la plata. En 2020 fuimos la empresa más rentable y lo que más me contenta es que la calificadora Fix SCR (la filial local de Fitch) reconociera que nuestra liquidez obedece al intercambio comercial, a que estamos haciendo nuestro trabajo como banco".

No veo una apuesta contra el peso con posibilidad de materializarse

Acerca de la profundización del crédito a largo plazo, este medio le preguntó sobre su propuesta hipotecaria -que actualmente cobra UVA +13,5%, diez puntos más que con Melconian-, a lo que respondió que: "Ya vamos a volver al mercado hipotecario", pero por el momento "Estamos en un paso intermedio, que es la línea de crédito para refacción y ampliación por hasta 2 millones de pesos que permite, dependiendo de la zona del país, construir entre 25 y 35 metros cuadrados adicionales y vamos a extenderlo para que sirva para la conexión a la red troncal de servicios como gas y agua".

El reclamo de los empresarios

La convocatoria fue esencialmente a empresas pymes, entre las que se repetía el mismo lamento. "Si se acomodaran algunas variables macroeconómicas, sería tanto más sencilla la cosa", resumió a este medio un empresario marplatense.

Consultado por las dificultades en este frente, Hecker dejó en claro que para él la presión cambiaria de los últimos días no va a desembocar en una devaluación: "No veo una apuesta contra el peso con posibilidad de materializarse", aseguró.

Por temor a un salto cambiario, no paran de crecer las operaciones con dólar futuro

Así y todo, consideró que una suba de la tasa de interés podría descomprimir la presión cambiaria, pero no así generar una baja de la inflación como predicaba Sturzenegger: "No funcionó, con el gobierno anterior fuimos a una estanflación".

De todas formas, advirtió que comparte la preocupación de los empresarios por la preocupación porque la meta del 29% de inflación de Guzmán se vio rápidamente superada incluso con dólar planchado, tarifas pisadas y salarios alineados a la pauta inflacionaria oficial, lo que muestra una inercia inflacionaria muy fuerte "por causas de larga data". Y aunque no postuló una solución propia para la inflación, descartó de plano que un esquema de dolarización o de convertibilidad sea la manera incluso si puede domar los precios en el corto plazo. "Se entra fácil, pero se sale muy difícil", dijo